A las 8´30 como estaba previsto salimos de Villaverde, con un sol esplendido y el autobús lleno, solo algunas bajas de última hora.
El camino es largo y sin parada llegamos a Aragosa, pequeño pero muy hermoso municipio donde comienza nuestra cómoda ruta, que discurre en la margen izquierda del rio, avanzamos rodeados de los colores del otoño y el reflejo del sol que afortunadamente calienta lo suficiente como para amainar el aire frio que se desplaza por el cañón, los verdes amarillentos amelcochados de los chopos, los cárdenos de los nogales otoñando y los jaunos del los arbustos de ribera nos alegran la vista y el alma en nuestro relajado caminar que sin darnos cuenta nos acerca a la Cabrera, donde aquí si damos cuenta de un tentempié merecido en un bonito lugar que algunas se apresuran a apuntar en los sitios para escapadas gastronómicas.
Cruzamos el hermoso puente y después de atravesar el campo de futbol, tomamos una senda un poco menos agradable, pero si vistosa que transcurre por un barbecho y que nos acerca a Pelegrina donde al abrigo de unos centenarios robles que tapizan el suelo con sus hojas nos disponemos a saborear la ya conocida gastronomía Incolora que cada uno aporta al evento, botas con inmejorables caldos, compañía inmejorable….cabezadita….. y ahora a las hoces.
Las atacamos desde abajo después de atrochar por una escombrera del pueblo y casi sin conocimiento nos embarcamos en una suerte de rodeo a la fortaleza que nos conduce a un precioso mirador donde a pesar del esfuerzo la recompensa es inigualable unas vistas de todo el Cañón y sus buitreras al atardecer; descendemos a el pueblo de Pelegrina y pasamos a las cervecitas y refrigerios preferidos de cada una…autobús de regreso, Nuestro querido y siempre diligente Miguel se pone manos a la encuesta incolora, lotería y mancheguita por este orden, a esto último le ayuda mas gente .Una vez más el disfrute se impone al cansancio y los 20 kilómetros que hemos recorrido pasan a formar parte de los hermosos recuerdos con los que hacemos vida.
Quisiera agradecer a todas las personas que con su dedicación y presencia hacen posible estos ratos por todo lo que me han aportado en momentos complicados, apoyo, aliento, consejos, cordura, a todas gracias y hasta la próxima.
Alfonso.